Es una doble bodega que ocupa la manzana delimitada por la Avda. de la Bajamar y las calles Valdés, Aurora y Sextante, cuyos cascos simétricos se sitúan en los bordes sur y norte respectivamente de la parcela. El casco sur es propiamente la bodega Gutiérrez Colosía y el casco norte, que ha tenido numerosos propietarios diferentes a lo largo del tiempo, es actualmente el supermercado Serodys.
Estas bodegas están bellamente ubicadas en la orilla derecha del río Guadalete, muy cerca de su desembocadura, en el lugar que en su día ocupó la ermita de Guía. Durante muchos años estas bodegas fueron la última edificación del Campo de Guía y entre los arenales de la playa de la Puntilla y la bodega había una pequeña depresión que se inundaba con las mareas vivas. En estas ocasiones el agua del mar llegaba hasta el lindero sur de la bodega, como se aprecia en la foto de principios de siglo. Casi ninguna otra bodega del marco de Jerez en la actualidad goza de una situación tan privilegiada.
Las condiciones microclimáticas de las bodegas, especialmente la de Gutiérrez Colosía, son extraordinarias porque ofrecen su fachada más larga a los vientos de poniente y suroeste que aportan la frescura y humedad tan necesaria para la crianza de los vinos finos y que contribuyen a la personalidad de los vinos finos de El Puerto.
Aunque se suele pensar que los vientos dominantes en la zona son los de levante porque son los más molestos, en realidad los vientos dominantes son los de poniente, como se muestra en la rosa de los vientos procedente de un estudio realizado con los datos de la estación climática de la AEMET del aeropuerto de Jerez desde el año 1952 a la actualidad.
Estas circunstancias climáticas extraordinarias también se aprecian comparando los datos de temperaturas máximas de la estación climática de la Junta de Andalucía situada en el poblado de Doña Blanca, muy cerca del río Guadalete a esa altura, y la situada en el edificio de Apemsa, justo al lado de la bodega de Gutiérrez Colosía. Se puede observar una reducción de las temperaturas máximas de más casi dos grados centígrados en los meses de verano.
El terreno donde se construyeron las bodegas era de propiedad comunal y se solicitó a censo redimible en 1835 por D. Ramón García Gastón y Ángel María de Castrisiones, que fue alcalde de Cádiz en 1836. En la medición definitiva realizada 1837 el terreno tenía una superficie de 6587 varas, equivalente a unos 4600 metros cuadrados y fue valorado en 14.625 reales de vellón.
En el proyecto original del maestro mayor de la ciudad Diego Filguera la bodega se componía de dos cuerpos, el propio de bodega y el patio trabajadero, pero se construyeron dos bodegas gemelas, aunque no conocemos si lo fueron al mismo tiempo, porque la bodega situada al norte no tiene la fecha inscrita en el frontón.
En cada bodega la fachada está dividida en dos partes de dimensiones similares. El cuerpo del casco de bodega tiene 4 ventanas con dinteles curvos realzados con recercados. En el hastial se encuentra un rebaje rectangular donde aparece la fecha de construcción, pero que en el proyecto original era un óculo circular.
El cuerpo correspondiente al patio trabajadero tiene una puerta central, enmarcada `por pilastras adosadas, rematándose dicha puerta con un arco de medio punto. En la bodega norte la puerta se ha ampliado y modificado para permitir el acceso de camiones. A ambos lados de la puerta, aparecen dos ventanas ciegas recercadas con dinteles rectos. Todo el conjunto de la fachada está recorrido por un zócalo. En la foto aérea de los años 60 se puede observar que en la bodega norte el patio trabajadero estaba porticado como era usual en esas instalaciones para facilitar el trabajo con las botas. Por el contrario, en la bodega sur el patio trabajadero se cubrió para usarlo como ampliación de instalaciones de bodega.
Cada bodega tiene cuatro naves de nueve arcadas de piedra arenisca que descansan sobre pilares cuadrangulares de la misma piedra. Las cubiertas tienen la estructura clásica a dos aguas con teja árabe sobre tableros de ladrillo por tabla con alfajías y vigas de madera.
Juan Gómez Benítez
Fuente: “Introducción al estudio del urbanismo portuense. El ensanche del Campo de Guía”. Rafael Sánchez González.