Con el título ‘’Plano de fachada, perfil y planta del Coliseo de Comedias en El Puerto de Santa María”, se conserva en el Archivo Histórico Nacional un documento grafico de sumo interés.
Se trata del proyecto de una casa de comedias, con galerías sobre pilares bordeando por tres de sus lados un patio forma de U. Tras la fachada principal, en la que tres entradas garantizaban el acceso de los espectadores separados por grupos de localidades (10 y 11), se abría un pórtico (1) en cuyas esquinas dos escaleras conducían a los aposentos o tribunas (3) y a la cazuela (espacio destinado a las mujeres).
En eje con la entrada principal se situaba el patio (4) y el teatro propiamente dicho (5), con dos “comunes “o retretes (22) en el extremo derecho del corredor (2). Al fondo y con puerta al exterior (8), estaba la zona dedicada a los actores y demás miembros de la compañía, con vestuario (6), cuartos para los cómicos (9) y un almacén (7).
Toda esta estructura era soportada por pilares de sección rectangular que sostenían el entramado horizontal de cada uno de los distintos pisos de localidades y, a juzgar por el diseño de fachada, se cubría con tejado a dos aguas.
El coliseo contaba asimismo con un edificio anexo de dos plantas, tal vez destinado a vivienda del arrendatario o propietario, en el que se ubicaba un área a especifica para café (13 y 14), con paso directo desde el vestíbulo del coliseo (12).
No consta en el plano autor, ni fecha, pero la estructura y disposición que presenta permite situarlo hacia la segunda mitad del siglo XVIII.
Es interesante señalar que en 1789 un vecino de El Puerto, Josef de la Flor, solicitó por instancia al Consejo de Castilla se le concediera facultad para construir a sus expensas una “casa de comedias”. Dicha solicitud provocó un pleito con el ayuntamiento que se prolongaría varios años, durante los cuales, y a pesar de la oposición de los munícipes, se desarrollaron funciones teatrales.
Dado que este plano se conserva en los fondos del Consejo de Castilla, del Archivo Histórico Nacional, que tenía entre sus innumerables atribuciones la del control en última instancia de los espectáculos y diversiones públicas, es muy probable que nuestro documento pertenezca a este este litigio que fue publicado por J. J. Gómiz León en un articulo de la “Revista de Historia de El Puerto”.
Desconocemos dónde pudo estar situado. Tal vez ocupó alguna de las fincas de la conocida calle Comedias, de la que existen referencias con este nombre al menos desde el siglo XVIII y que en aquella fecha comenzaba en la actual plaza de Juan de la Cosa y finalizaba en la plaza de las Bodegas.
R.G.R.