El pasado domingo día 30 de marzo Betilo realizó una visita cultural a tres emblemáticas iglesias de Jerez de la Frontera, guiados por el historiador del arte José Manuel Moreno Arana, a quien agradecemos su valiosa aportación.
El recorrido incluyó las iglesias de San Mateo, San Lucas y San Juan, todas ellas parte del conjunto de templos dedicados a los cuatro Evangelistas, junto a la iglesia de San Marcos. Construidas en la época de Alfonso X El Sabio después de la toma de la ciudad en 1267, estas iglesias se erigen en el lugar donde originalmente se encontraban antiguas mezquitas dentro del recinto amurallado islámico.
Las tres iglesias comparten características artísticas comunes, con artistas que trabajaron en El Puerto y en Jerez y presentan añadidos de distintas etapas arquitectónicas que conviven armoniosamente, con diferentes alturas en su interior.
La iglesia de San Mateo (FOT. 1), de una sola nave muy ancha, data de finales del siglo XIV y cuenta con bóvedas tardo góticas, elementos decorativos manuelinos y barrocos, diversos retablos de estípites y barrocos, una imagen de Diego Roldán. La portada principal, cegada tras el terremoto de Lisboa de 1755, fue realizada por Alonso Rodríguez, maestro que trabajó en la Prioral y el Monasterio de la Victoria de El Puerto.
La iglesia de San Lucas (FOT. 2), también de factura medieval, fue revestida en su interior en época barroca con bóvedas de yeso que cubrieron la techumbre original de madera. Además, presenta una bóveda sobre trompas con dientes de sierra de estilo gótico mudéjar, una tribuna para músicos y un antiguo cuadro de San Nicolás de Bari, también presente en la azulejería del siglo XVIII que decora el frontal de su altar, santo que asimismo está representado en distintas iglesias portuenses.
Por último, la iglesia de San Juan (FOT. 3) se caracteriza por sus tres tramos de distintos estilos. La Capilla Mayor, gótico mudéjar , el centro tardo gótica, y el tercer tramo renacentista, el cual se relaciona con Hernán Ruiz II, autor del remate de la Giralda de Sevilla. Destaca por ser la única que contiene pinturas murales mudéjares documentadas en la capilla de los Tocino (FOT. 4) y por su portada colosal renacentista, con una torre de Martín Calafate, otro artista que trabajó en la Prioral.
Estas tres iglesias, con sus estilos mudéjar, gótico, renacentista y barroco, nos invitan a seguir explorando la rica arquitectura de esta época jerezana.
Pilar Sánchez Toscano






