En el corazón de El Puerto de Santa María, la casa que acogió al célebre escritor Washington Irving en la calle Palacio 57 luce hoy empañada por una negligencia inaceptable. La imagen que acompaña este texto es testimonio irrefutable: cables eléctricos y cajas de conexión rodean una artística placa conmemorativa que debería ser orgullo de nuestra ciudad (FOT. 1).
Elaborada en mármol, fue ejecutada por el conocido escultor jerezano Francisco Pinto Berraquero, posiblemente según información de su hijo, en colaboración con su hermano Lutgardo, de ahí la firma F. L. Pinto.
En la misma, con un retrato de medio cuerpo del escritor y una vista panorámica de la Alhambra, ambos en bajorrelieve, se lee: WASHINGTON IRVING ILUSTRE ESCRITOR NORTEAMERICANO. AUTOR DE “LOS CUENTOS DE LA ALHAMBRA” VIVIÓ EN ESTA CASA EN EL OTOÑO DE 1828 Y EN ELLA TERMINÓ DE ESCRIBIR SUS LIBROS “LA CONQUISTA DE GRANADA” Y “COLÓN”. LA CIUDAD Y SU AYUNTAMIENTO RINDEN ESTE HOMENAJE A SU MEMORIA. OCTUBRE DE 1965 (FOT. 2).
Lejos de enaltecer su figura, la escena actual desvirtúa el valor histórico del lugar, reflejando el escaso compromiso de la administración local con la conservación del patrimonio artístico. ¿Es así como tratamos a quienes ayudaron a proyectar la imagen de Andalucía en el mundo?
Las ciudades que valoran su historia la protegen; no la arrinconan tras instalaciones improvisadas. Este atentado visual ofende no solo a la memoria de Irving, sino también a los ciudadanos que desean una ciudad que respete su legado.
El Puerto de Santa María necesita urgentemente un plan de conservación patrimonial coherente y digno.
Fco. García Áspera y R.G.R.
