Presentamos en este artículo algunas de las numerosas transformaciones de bodegas en viviendas en la ciudad de Jerez que han respetado su estética bodeguera y pueden servir de modelo para las intervenciones previstas en el Campo de Guía. (FOT. 1).
ANTIGUOS CASCOS BODEGUEROS DE DOMECQ. La zona del barrio de San Mateo en las proximidades de la Puerta de Rota estuvo tradicionalmente ocupada por los cascos bodegueros de la firma Pedro Domecq, actual Bodegas Fundador. Algunas de sus antiguas bodegas se han transformado en conjuntos residenciales que no se diferencian de otros edificios bodegueros en uso en la zona (FOT. 2).
En primer plano de la Puerta de Rota se alza imponente la antigua bodega El Cantón de 8 naves transformada en lofts de lujo en una intervención que ha respetado las fachadas y ha abierto grandes claraboyas en las cubiertas (FOT. 3). La bodega, que fue construida por Juan Haurie en 1796 y adquirida después por Pedro Domecq Lembeye en 1832, constituyó un modelo estilístico que siguieron muchas otras bodegas del siglo XIX de Jerez.
Las bodegas ubicadas en las calles San Blas y Balderrama conformaban un conjunto bodeguero con largos cascos a una y otra calle y una gran bodega entre ellas. Los dos cascos bodegueros con fachada a la calle se han transformado en viviendas, sin modificar apreciablemente sus fachadas.
El respeto de la estética bodeguera se puede apreciar en los edificios de las dos aceras de la calle San Blas, donde a un lado se ve la fachada de una bodega actualmente en uso y al otro se ven las viviendas de planta baja más primero, con sus ventanas y tejado de estilo similar al de la bodega de la acera de enfrente sin que se observe una apreciable diferencia en las apariencias a los dos lados de la calle (FOT. 4). Aunque en el bloque de viviendas parece haberse aumentado la altura en torno a 1 metro, esta diferencia a simple vista resulta casi inapreciable.
En la calle Balderramas hay un primer conjunto de viviendas de una sola altura y a continuación un segundo de dos alturas, similar al de la calle San Blas (FOT. 5). Entre las dos calles existía una antigua bodega de tipo claustral que se ha transformado en lofts de lujo (FOT. 6).
CONJUNTO RESIDENCIAL DE LA RIVA. Está ubicado al este de la ciudad, al final de la calle Arcos y frente a la bodega Lustau (FOT. 7). Se desarrolla sobre tres cascos que pertenecieron a la antigua bodega De la Riva que fueron adquiridas por la firma Domecq en los años 70, aunque llevaban tiempo sin uso bodeguero. Dos de estos cascos son muy alargados, con unas dimensiones de 125×23 m y cuatro naves y el otro que es más proporcionado tiene unas dimensiones de 71×35 m y 6 naves, todos con estructura bodeguera clásica y cubierta a dos aguas.
La actuación edificatoria implica la rehabilitación interior de los edificios para adaptarlos al uso residencial sin alteraciones esenciales en la estructura exterior de los cascos ni aumento de altura o volumen. Para ello se aprobó una modificación puntual de las determinaciones urbanísticas del PGOU.
Consta de 43 viviendas bautizadas por la constructora como “Sherry Homes” que no son perceptibles desde el exterior, por lo que sólo a vista de pájaro es posible contemplar la intervención. Además, cuenta con unos generosos espacios libres que suponen una prolongación de las viviendas hacia el exterior (FOTS. 8 a 10).
Se describe “Sherry Home” como una vivienda implantada en el interior de un casco de bodega, que mantiene la identidad y singularidad de un espacio industrial bodeguero en cuanto a morfología, materiales, texturas, iluminación y otras características propias de esta tipología de edificación.
Juan Gómez Benítez
