A partir de la Constitución de Cádiz de 1812 y especialmente tras el fin de la década absolutista los ayuntamientos dispusieron de competencias crecientes sobre la organización del espacio urbano de sus municipios y se convirtieron en uno de los principales organismos productores de cartografía urbana en España.
La gestión de estas competencias quedó regulada por dos normativas urbanísticas: la Real Orden de julio de 1846 sobre planos geométricos y las «Instrucciones para la ejecución de los planos de alineaciones» de diciembre de 1859 que establecía detalladas normas para la confección de dichos mapas en todos aquellos municipios cuya población fuera superior a los ocho mil habitantes.
Atendiendo a estas ultimas Instrucciones en el año 1865, Miguel Palacios y Guillen levanta a escala 1: 2500 el “Plano Geométrico de la Muy Noble Muy Leal Ciudad y Gran Puerto de Santa María”, siendo uno de los primeros trabajos que este arquitecto y perito agrimensor realiza antes de su nombramiento como Maestro Mayor de obras del ayuntamiento de El Puerto, cargo que ejerció en diversos periodos.
Siguiendo el estudio que F. Acale Sánchez realizó en 2004 , Palacios y Guillén cartografía con gran detalle la ciudad de la segunda mitad del siglo XIX. A diferencia de los planos urbanos anteriores, aparecen por vez primera rotulados todos los nombres de calles con sus correspondientes alturas tomadas desde el nivel de la bajamar de equinoccio, la planta de las iglesias y capillas y se señalan los edificios públicos existentes en ese momento (Casas Consistoriales, Escuelas, Hospital, Teatro, Plaza de Abastos …) y el cuartel de caballería.
Asimismo, recoge el ensanche de Campo de Guía, el nuevo puente sobre el río Guadalete y las líneas de ferrocarril con la estación. La descripción del plano se completa con la anotación sobre las manzanas de los nombres de las bodegas mas importantes de la ciudad. Debido a su interés el mismo Miguel Palacios lo reprodujo en grabado y las copias fueron vendidas mediante suscripción.
Unos años después, en 1889, Palacios redibuja para la Guía Geográfica de T. Almanza y Co una nueva versión del plano, en este caso a escala 1:1000. M. Pacheco, J. I. Buhigas y F. Acale “Itinerarios Portuenses de la arquitectura del S. XIX”, subrayan que aunque se trata de un plano comercial en el que se recogen los establecimientos bodegueros de la ciudad, con anuncios insertados en el marco, el arquitecto no deja pasar la oportunidad de incorporar las transformaciones urbanas que se habían sucedido en los veinticinco años transcurridos desde la realización de Plano Geométrico: fábrica de gas, entorno del ejido de San Francisco, nuevo edificio de pescaderías y sobre todo la nueva plaza resultante de la demolición del convento de los Descalzos.
El Plano Geométrico con sus modificaciones estuvo vigente hasta mediados del siglo XX, existiendo varias reinterpretaciones posteriores.
R.G.R.