Tras consultar fuentes de la Hermandad de la Humildad y Paciencia, su hermano mayor, D. José Carlos Romero Marroquín, nos informa que en marzo de 2014 la Junta Gestora de ésta encargó al arquitecto Ruiz Avilés un informe para evaluar el estado de la capilla de la Aurora (FOT. 1) después de sufrir desprendimientos de yeserías de la bóveda por filtraciones de agua procedente del tejado (FOT 2).
En principio, por seguridad, “se hace necesaria una actuación de urgencia para consolidar las piezas de ornamentación de la misma y para retirar aquellas que no puedan ser fácilmente fijadas para su posterior evaluación”. En el citado informe se recomendaba “no permitir el acceso público a la Capilla hasta que no sean ejecutadas estas medidas o limitar la circulación bajo esta zona central para evitar riesgos innecesarios” (FOT. 3).
Con la conformidad del párroco de la Prioral se decide que la hermandad abandone temporalmente la capilla, su sede canónica, estableciéndose con sus titulares en la iglesia conventual del Espíritu Santo. Eso ocurrió el 18 de diciembre del mismo año. Simultáneamente, la cofradía contacta con la concejalía de Vías y Obras del Ayuntamiento de El Puerto para realizar el proyecto de obra necesario y reparar los desperfectos de aquélla. Después de meses de trabajo fotografiando, tomando datos y realizando catas en la cúpula para visualizar el estado de las vigas de la cubierta donde hubo desprendimientos no se llega a un acuerdo económico (FOT. 4).
Ha transcurrido una década desde entonces. Y mientras, incluso sabiendo que se trata de un BIC y se aprobó el PEPRICHYE, donde la capilla queda catalogada con el conjunto de la basílica de Nuestra Señora de los Milagros en el nivel I de protección, no se ha avanzado nada en su recuperación. Eso sí, según este documento se permiten las “obras tendentes a la buena conservación del patrimonio”, se obliga a una “restauración de la Capilla de la Aurora y rehabilitación o reforma de la Casa de Hermandad, manteniendo la relación entre ambas piezas” y “también se tiene en cuenta la composición volumétrica y elementos singulares para ésta”.
Tras varias reuniones con el párroco y el obispado de Jerez, la hermandad de la Humildad consigue un convenio para que se decrete la cesión temporal de la capilla de la Aurora a la cofradía y obtener un aval de la operación financiera para su rehabilitación. Actualmente se está finalizando la redacción del proyecto y tramitando la solicitud de licencia de obra, a cargo de una empresa adjudicataria y arquitecto elegidos por el obispado. Dicho acuerdo fue refrendado en cabildo extraordinario de la hermandad el 15 de marzo de este 2024. Las obras de restauración afectarían a la fachada principal, puertas de acceso a la capilla y yeserías de las bóvedas, así como a la eliminación de hierbas y mantenimiento de las cubiertas para evitar filtraciones de agua (FOT. 5).
Por su parte, la hermandad, a través de una comisión colaboradora, trata de conseguir fondos necesarios para el comienzo de dichas obras que en su primera fase tendrán un coste de 72.000 €. Con este objetivo ha comenzado una campaña en la que se hace un llamamiento a diferentes administraciones públicas y privadas que puedan y quieran subvencionar dichas obras.
Desde estas líneas invitamos a cuantos portuenses y amantes de la historia y el arte de esta ciudad deseen colaborar en la recuperación de la añorada Capilla de la Aurora. Ojalá consigamos, diez años después, su reapertura como sede de la hermandad, cultos, visitas turísticas y otros eventos culturales y religiosos.
Francisco González Luque