La bodega conocida como La Honda se sitúa en la calle La Palma, entre la que recibe este nombre y la casa que perteneciera a los Böhl de Faber (FOT. 1 arriba). Su nombre obedece precisamente a encontrarse semiescondida entre varios inmuebles (las bodegas que conforman el conjunto recordado como Bodegas de Exportación y viviendas) (FOT. 1 abajo).
Cronológicamente hay que situarla anterior a la de La Palma, que data de 1869, ya que forma parte de un conjunto de obras realizadas por la familia Osborne en esta calle homónima con el fin de obtener un conjunto homogéneo de casa y bodegas. Según consta en la partición de bienes de Tomás Osborne Böhl de Faber, La Honda ocupó el lugar de una vivienda anterior con una extensión de 586 m2.
Se conserva en el Archivo Histórico Municipal el expediente de dicha obra numerado “1853/22“con el título “Sobre la obra que trata de ejecutar D. Tomás Osborne en sus bodegas calle de Comedias nº 4” y fechado en junio y julio del año 1853. D. Tomás Osborne Böhl de Faber solicitaba licencia para continuar la construcción de estas bodegas con la intención de “darle más extensión”. El maestro mayor de obras de la ciudad, Diego Filgueras, firmó el plano de alzado de la bodega (FOT. 2). La aprobación de éste, fechada en la sesión plenaria del 18 de julio de dicho año, queda condicionada a que “el aparejador cuide con eficacia las andamiadas para evitar cualquiera desgracia”.
Las obras se iniciaron después de la reforma de la finca adyacente, conocida actualmente como casa Böhl de Faber. Esta consistió en aumentar la altura de la fachada, siguiendo el expediente nº 1852/8 titulado “Sobre levantar la fachada de la casa nº 15 de la calle de La Palma”, fechado en 1852.
Asimismo conviene saber que para dar continuidad a la casa con la bodega La Honda se realizó otra obra en cuyo expediente “Dª Aurora Bolh , Vda. de Osborne solicita permiso para variar la fachada de la casa de su propiedad calle de La Palma nº 15”, fechado en septiembre de 1861. Se solicitaba permiso para modificar su fachada con el objetivo de añadir una habitación sobre una bodeguita de su propiedad, y se adjunta el plano firmado por ella y Diego Filgueras (FOT.3). Este hecho coincide con el comentario de Juan Nicolás Böhl de Faber en una carta fechada en 1822, recogido en el libro “Duff Gordon y la fundación de Osborne” de que su casa estaba construida encima de una bodega de la compañía.
El proyecto fue autorizado con la condición de que esta fuera dirigida por “persona competentemente autorizada” y siguiendo las ordenanzas de Policía Urbana.
Contigua a la bodega La Honda por su parte interior existió otra bodega conocida como “El Jardín”, la cual, con una extensión de 332 m2, fue alquilada a Dña. Tomasa Beltrán, viuda de Juan Nicolás-Brunit en 1826 para posteriormente ser adquirida (FOT. 4). Esta bodega fue utilizada como auxiliar y lavadero de botas y en los últimos tiempos se habilitó como aparcamiento para consejeros de la bodega. En la obra de remodelación aparecieron numerosas tinajas subterráneas, lo que parece mostrar que con anterioridad esa bodega se utilizó como almacén de aceite.
Juan Gómez Benítez y Francisco González Luque
